La modificación de la Ley 31973 fue aprobada este 2024 por el Congreso de la República pasando por alto las observaciones de los pueblos indígenas y de sociedad civil, además que representa una apertura mayor a la extracción de madera e impulsa la agroindustria. Esta modificación de Ley vulnera los derechos de los pueblos indígenas, quienes se han pronunciado en contra y siguen luchando por sus territorios.
El Movimiento Ciudadano frente al Cambio climático junto a la RUA San Marcos realizaron el taller «Ley Anti Forestal: reflexiones a partir de la amenaza latente a nuestra Amazonía» en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos el 20 de febrero, participaron especialistas, jóvenes y activistas. El objetivo del espacio fue generar reflexión y un espacio de articulación en torno a proyectos de Ley que están amenazando los bosques y por ende, generando mayor crisis climática.
Foto: Augusto Mostajo -MOCICC
«Lo que hace esta ley es sacar los bosques del régimen forestal y los mueve al régimen agrario. La norma tiene un vicio porque promueve la deforestación», explicó Juan Carlos Ruiz del Instituto de Defensa Legal. El Congreso, al aprobar esta modificación de la normativa le abre las puertas al extractivismo, en zonas de ecosistemas delicados.
«Esta ley beneficia a los terceros que invaden territorios indígenas e incrementa la amenaza contra los defensores indígenas», acotó Rocío Trujillo, abogada de AIDESEP. En varias ocasiones, organizaciones indígenas se han pronunciado en contra de la Ley Antiforestal. En un pronunciamiento, publicado por AIDESEP en diciembre del 2023, se afirma «Rechazamos el accionar vulneratorio del Congreso que aprueba proyectos de ley en contra de los pueblos indígenas. A pesar de los pronunciamientos y múltiples cartas dirigidas a los congresistas desde AIDESEP y otras organizaciones indígenas que manifestamos que esta modificatoria pone en riesgo los bosques, la diversidad biológica y sobre todo vulnera nuestros derechos colectivos como pueblos indígenas, que somos los principales defensores de la Amazonía».
Foto: Augusto Mostajo -MOCICC
Por su parte Frank Rivero de Proética opinó que «Esta Ley legaliza la deforestación histórica. Muchas empresas que hayan deforestado pueden regularizar y librarse de procesos administrativos y penales». Micaela Guillén, coordinadora nacional del MOCICC, afirmó que «una ley como esta en un tiempo de crisis climática es absurda. Lo que va suceder es que vamos a presionar nuestros territorios e incremental la deuda externa para afrontar los efectos del cambio climático».
«Debemos construir una narrativa, articular en defensa de la naturaleza para hacer frente a los grandes intereses empresariales detrás de esta ley» comentó Augusto Ruiz de Alsakuy Agroecológica. Finalmente, Salvador Oré, del Movimiento contra la Ley Antiforestal afirmó que «el tema ambiental no es algo postergable, está en juego nuestro futuro. Esto debe hacernos movilizar como jóvenes, ya que queremos ir más allá de derogar la Ley Forestal».
