Por Martin Vastein, de Climate Tracker
NOS VAMOS A BONN
El lunes 10 de junio se dio el inicio a las negociaciones intersesionales en Bonn, el primer paso rumbo a la COP25 en Chile. Basado en la experiencia de las pasadas reuniones, es notable que estas negociaciones resultan complejas, sobre todo para quienes recién llegan al mundo ambiental. Es por esto que el viernes 14 de junio, el MOCICC y Climate Tracker brindaron el webinario “Katowice a Bonn: Tareas y acciones para la acción climática camino a la COP25”, intentando brindar las claves necesarias para su comprensión a aquellxs interesadxs en la temática.
¿QUÉ SE ACORDÓ EN PARÍS?
El Acuerdo de París establece que se debe limitar el aumento de la temperatura de la Tierra a 2 grados centígrados, pero idealmente no sobrepasar los 1.5 grados ya que 2 grados significarían un escenario devastante para los países isleños y ciudades costales.
Así mismo, los países firmantes deberían presentar sus planes de mitigación y adaptación y establece que debe haber 100 billones de dólares de financiamiento climático de los países desarrollados a los que se encuentran en desarrollo. ¿Qué contienen los planes y de qué forma sería el financiamiento? Estas dudas continuaron siendo tema de conversación en las COPs desde el 2016.
Un punto importante a tener en cuenta es que el Acuerdo de París, si bien es vinculante, no contiene lenguaje del estilo. Es un acuerdo lleno de palabras de aliento y sugerencia, más no de vinculación legal o mandato.
¿QUÉ PASÓ EN KATOWICE?
De manera general, en Katowice se acordaron maneras de reportar sobre lo que cada país firmante realiza en tanto mitigación, adaptación, daño y pérdidas. Así como también las maneras de mantener el proceso lo más transparente posible a través del inventario global; mecanismo implementado bajo el artículo 14 del Acuerdo de París que hace un balance de las metas a largo plazo que se propusieron a cumplir en el Acuerdo. Este balance se debe llevar a cabo cada 5 años.
Los puntos más salientes son lo que no se ha logrado y lo que se está negociando en Bonn. Uno de ellos son las fuentes de financiamiento ¿Qué cuenta como financiamiento? Según lo pautado en la COP24 en Katowice, el financiamiento puede provenir de seguros, préstamos o subsidios, dejando a cada país la voluntad de decidir cómo irá a proveerlo. Este punto resulta crucial, ya que los países pueden decidir otorgar el financiamiento en forma de préstamos que deben ser devueltos. ¿Cuánta justicia hay en ese mecanismo? La respuesta les sorprenderá.
¿DE QUÉ HABLAN TANTO EN BONN?
Entre otros temas pendientes de Katowice y que se van a estar debatiendo en Bonn son la inclusión del informe del IPCC sobre los 1.5 grados en el texto del organismo científico de la UNFCCC, el SBSTA. Durante la COP25, la mayoría de los países, incluídos la UE, “dieron la bienvenida” al reporte como última línea de negociación; mientras que Arabia Saudita, Rusia, Kuwait y los EEUU querían simplemente “notarlo”. Así como se lee, se discute si se cree o no en la ciencia más actualizada del cambio climático.
Otro punto a convenir es la línea de tiempo para el reporte sobre lo que cada país está haciendo en materia de mitigación y adaptación, así como también sus mediciones de contaminación al 2030. Estos reportes se llaman NDCs o Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional. Si bien el Acuerdo de París proponía revisar los NDCs cada cinco años, en Katowice no se llegó a un acuerdo y se decidió que habría una guía en común a partir de 2030. ¿No es mucho? Lo es.
Finalmente, uno de los puntos clave que se discutirá en Bonn es la utilización o no de los mercados de carbono. Este capítulo quedó vacío el año pasado, especialmente por el bloqueo de Brasil. Se intentarán crear guías para la creación de un sistema de mercado de carbono bajo el Acuerdo de París.
MARTÍN VAINSTEIN
Organizador de base, experto en comunicación digital, investigador académico en justicia climática y estudiante de Ciencia Política en la Universidad de Buenos Aires.
En el 2015 me mudé a Londres, estudié organización de base y campaigning, co-fundé dos organizaciones – Argentina Solidarity Campaign y Wretched of the Earth – con las que lideramos a 55.000 personas en la marcha climática más grande en la historia del Reino Unido.
Volví a Argentina y ahora trabajo junto con Climate Tracker como manager de comunicaciones para Latinoamerica, intentando influenciar el debate sobre combustibles fósiles en la región y acercarnos un poquito más a la justicia climática.