La Cumbre Internacional por el Yasuní, realizada en Puyo, Ecuador, del 27 al 30 de agosto de 2024, se consolidó como un evento crucial en la lucha por la protección de la Amazonía. Este encuentro reunió a líderes y lideresas indígenas, activistas, académicos, territorialidades y representantes de diversas organizaciones de sociedad civil para desarrollar estrategias que aseguren la preservación del Yasuní y la implementación de un modelo de desarrollo y post-extractivista.
Uno de los aspectos más destacados de la cumbre fue la II Asamblea por una Amazonía Libre de Combustibles Fósiles, donde líderes y lideresas de Perú, Bolivia, y Ecuador establecieron espacios de diálogo para construir una propuesta política que busca declarar a la Amazonía como una zona libre de la explotación de petróleo y gas. Además, esta asamblea subrayó la necesidad urgente de proteger los distintos territorios no sólo para los pueblos indígenas, sino para la humanidad entera.
La delegación peruana tuvo un papel clave en este proceso. Estuvo conformada por Jamner Manihuari, Vicecoordinador de la Coordinadora de las Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (COICA), Nazareth Flores, Coordinadora de Mujer y Familia, Marco Martínez, Coordinador de Territorios y Recursos Naturales de COICA, Olivia Bisa Tirko, presidenta de la Nación Chapra, y Rosemary Pioc, Presidenta del Consejo de Mujeres Awajún. Su participación fue de gran interés para fortalecer la propuesta de una Amazonía libre de combustibles fósiles.
Juan Bay, presidente de la Nacionalidad Waorani en Ecuador (NAWE), resaltó durante el evento que «la Amazonía es nuestro hogar ancestral, y protegerla no solo es un derecho, sino un deber para con las futuras generaciones y la humanidad entera.»
Esta visión fue compartida por por Olivia Bisa, presidenta de la nación Chapra, quien enfatizó » Basta de extractivismo en nuestros territorios, porque nuestros territorios no son una fuente de caja chica como lo ven los Estados y gobernantes, sino una fuente de vida» «[…] El Sí al Yasuni del pueblo Waorani y ahora su Sí al Tratado de No Proliferación de Combustibles Fósiles son una esperanza y una inspiración para el mundo».
La campaña para declarar a la Amazonía libre de combustibles fósiles es impulsada por el MOCICC (Movimiento Ciudadano frente al Cambio Climático), que, como punto focal de la Iniciativa del Tratado para la No Proliferación de Combustibles Fósiles en América Latina, viene desempeñado la coordinación y promoción de esta iniciativa.
Finalmente, la cumbre no solo fue un foro de discusión, sino un espacio para la acción. Se establecieron mesas de trabajo que desarrollaron un Plan de Acción Post Consulta Popular, enfocado en la protección del Yasuní y en la creación de modelos de desarrollo alternativos. Estos esfuerzos buscan presentar un frente unido en foros internacionales como la COP30, asegurando el respeto a la voluntad popular y promoviendo soluciones dialogantes con los territorios.